La recuperación bifurcada
¿El nivel de actividad encontró un piso? ¿Hay recuperación? ¿Cuánto falta por recuperar? Son preguntas que desde el inicio del año los analistas nos venimos realizando y en parte sigue generando debate.
El indicador oficial de actividad económica (EMAE) solo registró un mes de crecimiento (mayo +0,7%) y el último registro disponible es de ligera caída (junio -0,3%). En este sentido, la información oficial señaliza que el nivel de actividad general aún no manifiesta un repunte, aunque sí la apoya la idea que la actividad económica general dejó de caer. El nivel de actividad más bajo se verificó en abril, mientras que en junio se ubicó apenas 0.3% por encima.
Por su parte, el indicador anticipado que elabora OJF refleja alguna diferencia respecto de la información oficial, ya que señaliza que el nivel de actividad general más bajo se ubicó en marzo, y ya presentó 4 meses con cifras positivas. El nivel de actividad más bajo se verificó, según este indicador, en el mes de marzo, y para julio se ubicaría 2% por encima.
Lo que las cifras agregadas esconden es la gran heterogeneidad que se verifica en el nivel de recuperación. Tomando sectores característicos seleccionados, queda claro que la recuperación es leve y también que se presenta una fuerte bifurcación.
Mientras sectores como Agricultura, Minería y Energía muestran un desempeño favorable, otros como Industria, Comercio y Hoteles-Restaurantes, se encuentran fuertemente deprimidos y sin señales certeras de haber encontrado un piso en el nivel de recesión.
Tomando como referencia el mes de septiembre de 2023, que es cuando el nivel de actividad general comenzó la tendencia recesiva que se prolonga hasta la actualidad, Agricultura, Minería y Energía acumulan una mejora de 2%, mientras que Industria, Comercio y Hoteles-Restaurantes acumulan una merma de 15%.
Marcos Cohen Arazi y Vanessa Toselli
Investigadores responsables de la sección Productiva.
